BARLEAND, NORBERTO
ALFORJA DE SUEÑOS

Ofrecí los claveles,
la premura, los hijos
convoqué las alforjas
de una mesa con sueños.
Solo vos
el abismo,
andar los caminos entre saltos y tumbos
por atajos del aire.
Era oscuro el bordado
del mantel que tendimos
en las noches de lluvia
en los días de calma
por los huecos que escuchan
el clamor y los ruegos.
Te busqué entre las ramas
y los bosques del alma
entre pinos del rocío
a la luz de los sauces.
Habías fugado
con intriga y ninguna palabra,
al candor del recuerdo
a poblar otra mesa
a beber otro vino

BRASAS DE SEPIA

¿Dónde están las criaturas,
los cráteres secos
con su larva de luto
y las brasas sedientas
negras de miseria?
¿Dónde el fervor
de los jóvenes sueños
archivados de sepia?
como explicar la tragedia y la nada.
Estas horas desiertas,
estos músculos quietos
y una breve ceniza
consumida en la pena

CORAJE DE TORO Y SANGRE

Moro, morena poeta de magia y luces
voz de voces con furia,
laguna de los milagros.
¿Dónde estaba la virgen
cuando golpearon tu puerta,
por que calles de Triana
paseaba la Macarena?
Atrás de Sierra Nevada
camino hacia la Alahambra
tu grito
madera y canto,
¡Ay de la bella Granada
junto al fusil del espanto.!
Coraje de toro y sangre
nunca rendido en la arena
envuelto en traje de luces
buscando a la Macarena.
Flamenco de los tablaos,
patio de flores tan bellas
paisaje de Andalucía
enigma de las estrellas.
Poeta de amor y lucha
de aquella España insurrecta,
banderas de altivo mástil
de rojo paño el emblema.
Acaso podrá la muerte,
del verdugo en la siesta
con el luto de tu sangre
no se vestirán de fiesta.Será tu canto poeta
de majestuosa firmeza
quien ilumine el camino
por donde labre la huella.
Gigante,
erguido.
valiente
Coraje de toro y sangre
nunca rendido en la arena
Federico de tormentas
romero de la victoria
olivar de los azahares
pasión de aromo y resina
¡Ay de la bella Granada
cubierta de flor y espinas

DESPEDIDA EN LA ÚLTIMA TARDE DE GAVIOTAS PERDIDAS

Fue una madrugada
de caricias en la intemperie
acunando soledades
en el infinito abstracto de los miedos.
Tiempo de paz sin geografía
cuando los aromos sueltan el perfume
y los hijos crecen en el espacio vertical,
los fantasmas prolongan
su canto alado de amapolas múltiple melodías
en la esbelta partitura
de besos que huyen y descansan
en el último escalón de la penúltima noche
cuando de las estatuas escaparon las gaviotas
separando nuestros rostros y la sangre.
La distancia cubrió los días,
confusa sensación de compartir
el vértigo
y los sueños que se caen.
Es tarde para ilusiones sin retorno
y reproches que estrecharon el camino
Botarán los pétalos sueltos
para unir sin desvelo
en las ásperas manos
un incierto destino.

EPOPEYA DEL SUR EN LOS BORDES DEL ORIGEN

Desde los bordes del origen
lágrimas de bravura
estremecen el casco gris de la ciudad.
Oro, plata.
Reyes. Virreyes
dudosa prosapia.
Mercaderes,
traficantes del metal y de la sangre.
Fatiga del sol
sobre los hombros esclavos,
látigo feroz
del dominio .
Trémula epopeya de patriarcas
con plomo y aire negro,
de estilizado mástil.
Puerto Sur
generosas anclas,
tierra fértil del pan y los milagros.
Cruel agonía de los muertos
elevando la espada
Oscuros túneles transitando
hacia los tristes tambores
del baile orillero.
Indio, mestizo, español
cruzaron al ritmo frenesí
las calles solitarias de San Telmo
subiendo por Balvanera y Montserrat
el pálido hollín de las carcasas,
estallando en Miserere,
los portales del Fuerte en San Cristóbal.
Rugosa humedad de sus máscaras
escondiendo envilecidos rostros
de la indolencia y el engaño.
Raíz fundacional pudorosa mezcla
donde
transitó la necedad de historias
fulgurando
en las profundidades del dolor.
Estirpe destemplada,
prepotente
de barro y faca,
turbio vino de las pulperías,
riñas, tajos,
rostros anegados de tristeza
y un futuro errante en las entrañas.
Pajonal, desierto, monasterios.
Aldea,
Aires Buenos,
campanarios, mazorca, grillla,
permanecen en las enancadas
páginas de la memoria
Patria de Patrias.
Patria de múltiples Patrias
Sur de las Pampas.
Resuenan estridentes los ecos
en sudorosas jornadas del
abandono.
Lejos,
muy lejos
distante,
casi ausente entre las sigilosas fábulas de los siglos
emergen
los estrangulados
gritos de la Libertad

FÉRTIL AGONÍA DE LA AUSENCIA

Estallan los ecos
petulantes,
efímeros
Ampulosas lágrimas
transitan
el humo denso
Es pequeño el espacio
de inmaculada pureza
donde evade el hombre
el dolor
en la fértil agonía
de su quietud
y avaricia

FRÍAS GRIETAS DE ESPERANZA

Hay voces que no callan sus delirios
en las copas derramadas
de vino y de nostalgia

Camino entre las grietas
frías de la casa
donde antes
pisaron las raíces
humillaron los gorriones
fugaron con las hojas
en la oscuridad del alba.

De ahí ,el canto
la profundidad del viento
su rugido de fuerza
sublevada,

para retornar desde las vértebras
lo ancestral de la ternura

y las ocultas esmeraldas
de un horizonte sin hierbas.

HABITANTES DEL TIEMPO

Por amplias ventanas
el sol
penetra en la casa,

Iluminando,

el sillón,
la mesa,
las fotos.

habitando el tiempo,
sin entender
que sucede fuera de nosotros.
mas acá de tus labios
rozando mi pecho.
Desconocemos sí la gente
camina por las calles,
el vértigo enceguece la belleza
o el amor
es la armonía del encuentro.

La razón,
sin razón
la plenitud
de compartir
soledades

HENDIJAS DEL ASOMBRO

Te necesito
entre los simples menesteres de los días,
por las hendijas donde filtren
caricias de besos presuntuosos,
en el atardecer de los misterios
y los enigmas crecidos en las dudas. Son horas de pausa,
con brisas abiertas
y serena quietud.
Atrás quedaron los tumultos
ciega pasión
de prolongados disturbios,
los rostros amados
en la plenitud del vértigo.
Hoy es hoy sin el pasado
una mochila
de momentos transcurridos
entre los clamores ocultos del asombro..
Otra fábula de amor trepó mi puerta
desde la madura armonía de los años
aun erguido de colores
y arrogancias.
Acudo a la profundidad de mis entrañas
con profundos deseos
en las concientes vivencias y sus ardores.
Son los últimos refugios de la carne
preservando suspiros
con el murmullo del polen
la sed del crepúsculo
y sus raíces
a las que siempre vuelvo
cuando parto

LABERINTOS DE IMPOTENCIA

Soy la sombra
de pasos presurosos,

vértigo de extravíos
que abrevan en la sangre,

designio del tiempo sin memoria

Impulsos y cautelas
confluyen

en laberintos
de místicas
por senderos sordos de impotencia.

Los años devuelven la conciencia
madurando la estatura del destino

y un nudo de simples gestos
acunan
aquel niño huyendo
de la inmensidad del sol
y sus destellos

* Nació en el barrio del Abasto.

NIEBLA DE LA HISTORIA

Nada hay de la gris colina
que se expande
tras un río de tristeza milenaria.
Por ocultas montañas
regadas de estrellas
un labrador de sueños
se esconde en la soledad del monte
camina por arbustos de tierra,
entre semillas del aire,
por los silencios del viento.
Nada fértil queda
en la niebla oscura de la historia
como si los ecos
de siglos y distancias
se fueran opacando
hasta sucumbir
en el destierro natural
del horizonte.
¿Cuánto pudo el hombre
crecer en la ordenada geografía
del cosmos,su paisaje de eternidad,
su destello de luz,
el sonido de la sombra?
¿Cuanto no pudo
y cuanto mas tardará
en devastar lo que aun queda?
hasta proyectar el derrumbe fatal
del infinito

PULSO DEL OLVIDO

Un manto de olvido
se expande lentamente
junto a estrías de fe.
No escucho
el pulso de tu voz
entre los pájaros.
mientras un abanico de nostalgia
invade mi cuarto humedeciendo las paredes.
deslizando
desteñidos afiches,
historias y paisajes
que ya fueron…

RESUELOS DE LA SANGRE

Sangro por los cristos
de cruces y espinas
en calvarios majestuosos de la historia.
por el llanto sumergido
en pendulares crestas del olvido � esta soledad
de lluvia dispersa del otoño,
espigas clavadas en las venas,
el cuerpo crispado de recuerdos
donde
una lágrima creció
desde la furia.
Alguna vez la aurora
mojó mis labios
y propuse el grito que no pude.
Pasiones dibujadas sin máscaras
destemplaron el cordón del tiempo.
¡Aquí estoy!
revolviendo la sangre
estallando hacia adentro
en lo cautivo del canto sin la voz
sostenido en la tormenta de los años.
Sangro por la sonrisa de los hijos
que brotaron en resuellos de la sangre
como los pájaros negros de pureza.
Erguido en los cristales
vuelvo a prolongar la noche
con los milagros y el misterio
enraizados
en lo profundo de mi sangre.

ROSTROS SIN NOMBRE

En la oculta tristeza
de los rostros sin nombre

alfombrando las calles
.el cielo aturde
un futuro de
herrumbe y miseria
donde el hambre urde
el dolor de la carne.

Anochecen los grillos
del canto enmohecido
pisoteando inocencias

entre tantos fantasmas
mientras duerme la noche
la eternidad de su siesta.

SEMILLAS Y AROMAS DEL ALMA

El pañuelo tejido de asombro
es un fruto de aroma indefinido.
una mojadura de paz
en la desnudez del alma
Entre los vapores celestiales
reclamo un nido
de lluvia
donde brote el deseo
para que anochezca la tarde

TINAJAS DEL CLAVEL A MEDIA LUZ

Cuando observo
tu rostro entre la gente
en el claro disturbio de los días,
ofrezco un clavel a media voz,
un sonido melancólico
en las tinajas del alma,
un velo de sed
en la garganta.
y un llanto de silencio
por tu ausencia